Celebración de Viernes Santo

Celebración de Viernes Santo

     1. Adoración de la Cruz     

–      Explicación: En la liturgia del Viernes Santo, la adoración de la Cruz es un momento central. Este acto simboliza nuestro respeto y veneración hacia el sacrificio de Jesús. Es un tiempo para reflexionar sobre el amor infinito de Dios y el precio de nuestra redención.

–      Cita Bíblica: Juan 19, 17 al 18 – «Y llevando su propia cruz, salió al lugar llamado de la Calavera, que en hebreo se llama Gólgota, donde le crucificaron, y con él a otros dos, uno a cada lado, y Jesús en medio.»

–      Referencia del Catecismo de la Iglesia Católica: 618 – «La cruz es el único sacrificio de Cristo, el ‘único mediador entre Dios y los hombres’.»

–      Momento Importante: El silencio profundo que acompaña la adoración de la Cruz.

–      Acción: Hoy, dedica un tiempo en silencio ante una cruz o un crucifijo en tu casa, reflexionando sobre lo que Jesús soportó por amor a nosotros.

     2. La Pasión del Señor     

–      Explicación: La lectura de la Pasión según San Juan es un elemento fundamental de la liturgia del Viernes Santo. Nos invita a meditar sobre los sufrimientos de Jesús y su entrega incondicional por la humanidad. Este es un tiempo para interiorizar la profundidad de su sacrificio.

–      Cita Bíblica: Juan 18, 1 al y 19, 42 – La narración de la Pasión de nuestro Señor Jesucristo según San Juan.

–      Referencia del Catecismo de la Iglesia Católica:  599 – «La muerte de Cristo es al mismo tiempo el sacrificio pascual que lleva a cabo la redención definitiva de los hombres.»

–      Momento Importante: La reflexión y el silencio después de la lectura de la Pasión.

–      Acción: Participa en la lectura de la Pasión en tu comunidad o lee en silencio el pasaje de la Pasión en tu hogar, permitiendo que las palabras toquen profundamente tu corazón.

     3. Oración Universal     

–      Explicación: La Oración Universal del Viernes Santo es una plegaria por las necesidades de la Iglesia y del mundo entero. Representa nuestra unidad como Iglesia y nuestra preocupación por la salvación de todos los pueblos. Es un momento para ampliar nuestra visión y orar más allá de nuestras necesidades personales.

–      Cita Bíblica: 1 Timoteo 2, 1 al 2 – «Exhorto, pues, ante todo, a que se hagan peticiones, oraciones, intercesiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos una vida tranquila y sosegada, con toda piedad y dignidad.»

–      Referencia del Catecismo de la Iglesia Católica: 1349 – «Todos se reúnen en la oración de los fieles, llamada oración universal, porque es hecha en nombre de toda la comunidad y por todos los hombres.»

–      Momento Importante: La intensidad y universalidad de las plegarias, reflejando la compasión de la Iglesia por todos los pueblos.

–      Acción: Dedica un tiempo a orar por las necesidades del mundo, especialmente por aquellos que sufren injusticias, enfermedades o soledad.

     Momentos en la Celebración:

1.      El Silencio y la Solemnidad: El Viernes Santo se caracteriza por su solemnidad y silencio. No hay misa como tal, reflejando el luto por la muerte de Cristo. Este silencio es profundo y reflexivo, invitándonos a meditar en el misterio de la muerte de Jesús.

2.      La Desnudez del Altar: El altar se encuentra sin manteles, velas ni adornos, simbolizando el vacío y la desolación después de la muerte de Jesús. Este despojo material nos invita a centrarnos en lo esencial de nuestra fe: el sacrificio redentor de Cristo.

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